Los aforismos han sido siempre una parte esencial de la obra de Ramón Andrés, como lo demuestran sus tres libros de aforismos ya publicados, Los extremos, Puntos de fuga y Malas raíces. En esta nueva entrega, que además de aforismos contiene pensamientos en prosa, Ramón Andrés reflexiona sobre su propia biografía y su oficio de escritor, sobre la importancia de la música y del arte, sobre la historia y la naturaleza, sobre la lentitud y la austeridad. Y denuncia con ironía y humor aquello que aborrece de nuestro tiempo, la ciega adoración de la tecnología, el absolutismo de la ciencia, el cultivo de la ignorancia, la suplantación de lo real por lo virtual, el individualismo que esclaviza, la obsesiva creación de necesidades. Libro lleno de sabiduría, aboga por la curiosidad, la admiración y el asombro, desde la quietud y la sencillez, como método de supervivencia, sabiendo que nadie sale ileso de su existencia.
Claire, una mujer de cuarenta y siete años en la cima de su carrera profesional, abandona su trabajo, su apartamento en París y todo lo que hasta entonces ha conformado su vida para regresar al pueblo de Bretaña donde creció. Allí reencuentra por casualidad a la profesora de piano de su infancia, quien le propone irse a vivir con ella. Poco a poco se reinstala en el lugar, reencuentra su primer amor y establece una profunda relación con su hermano menor. De forma inesperada, su hija, a la que no había visto desde hace veinte años, regresa para estar con ella. De forma polifónica, todos los personajes que se relacionan con Claire evocan a esta mujer cuya historia y destino se convierte en cada vez más sorprendente, a medida que se desvelan los secretos de familia, los celos y la violencia oculta que anidan en los protagonistas de esta novela profundamente inquietante y de una belleza sobria y envolvente que rastrea sin fin el enigma que constituye el hecho de estar en el mundo. á